Simplemente, era mas fuerte que yo. Mis instintos salvajes hacia él eran irrevocablemente sinceros y absurdos; siempre tratando de llamar su atención, la cual, de vez en cuando, conseguía captar.
No pedía mucho, simplemente ser dueña de la comisura de sus labios, por unos minutos. Ser las cadenas de sus abrazos contra mi espalda, y sentir febrilmente su calor en mi piel.
Y cuando la noche deja caer sus mantos de oscuridad, es cuando me llama desesperada, para hacerme compañía, en las frías noches de invierno que vendrán.
Veré el otoño pasar, al caer las hojas coloreadas por los matices otoñales. Rojo, verde, amarillo, marrón, y por que no, las mas tristes ramas. Desnudas, como mi alma...ante él.
Tan vulnerable, y no, no quiero ser la que siempre pretende estar bien, la que siempre pretende sonrisas a la gente al pasar, la que dice gracias y por favor, la que siempre canta y simula ser feliz a cada momento. Porque realmente, la felicidad, son solo momentos, escurridizos. Se nos escapan como si fueran, pequeños copos de nieves, que al tacto de la piel humana se disuelven en agua y ya no puedes retenerlos más. Solo quedara el recuerdo y esa manera de revivirlo cada día, a cada momento.
Y por esto, y mucho más, tengo mis momentos de felicidad.
Y saben que? Nadie, jamas, podrá arrebatármelos.
Porque la vida, sin recuerdos, estaría...tan vacía y desorientada.
The quiet scares me 'cause it screams the truth.
Soniaa.-
PD:APROBÉ CONTABILIDAD (: Una menos y quedan dos más de las equivalencias asquerosas.
