Todavía queda tanto por decir.

Todo se resume en pocas palabras dicen, Gustavo Adrian estamos esperando que vuelvas a casa. Te espero, te esperamos todos. Estamos pendiendo junto a vos de un hilo por tu estado de salud.

Solo espero poder volver a verte sobre un escenario y que le grites al mundo: "No me voy, me quedo aquí".

Tu energía es algo Mágico.

Carretera de palabras, solo las oye el mañana. 

Sin saber, justificaste la locura y te sumergiste en el mar de los encuentros perdidos.

Café, lectura y un poco de Chanel, fue donde te encontré.

Te conocí y ví las chispas de la oscuridad. 

Como siempre, dejando fragmentos de mis inspiraciones. Esta vez, dedicadas al único Gustavo A. Cerati.

Sonia, la chica con ojos de ayer.